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Arquitecto.
Fundador y Director de Paradigma desde 1988.
javier@inter-paradigma.com

 

El punto de venta es un espacio de comunicación social, donde las marcas compiten por atraer la atención del consumidor.

El diseño cumple aquí un rol fundamental, ya que crear impacto es el objetivo.
Pero no puede lograrse en desmedro a los valores permanentes de la marca, a riesgo de perder la identidad.

Es así que los diseñadores nos encontramos constantemente en esta disyuntiva, cuánto le pongo de creatividad?, cuánto me ajusto a los lineamientos de la marca?..
Un equilibrio que constituye todo un desafío.

Hace un tiempo asistí a una capacitación de marca que giraba en torno a la frase: “el lujo debe permitirse todos los caprichos de la imaginación”. 
Obviamente al final de la misma, nos entregaban guías enormes donde se indicaba qué se podía hacer y de qué forma utilizar el logo, colores, materiales y acabados, ubicación de productos, etc,  y muchos etceteras mas. Incluyendo el famoso capítulo: “do´s & don´ts”.

Entonces, llega el momento en el cual nos sentamos frente a la hoja en blanco. 
¿Cual es la dosis de creatividad que podemos aplicar sin correr el riesgo de perder la identificación?.
Es ahí cuando comenzamos a disfrutar del viaje. Las formas se prefiguran en nuestra cabeza, y empiezan a bajar al papel, o a la pantalla.

Ese momento mágico es la razón por la que yo amo nuestra profesión.

Luego se van sumando los requerimientos funcionales y constructivos, ahí aparece el oficio. 
Pero ese tema me gustaría dejarlo para otro momento.

Innovación y permanencia:
La receta de la comunicación en el punto de venta, necesita una dosificación equilibrada de los ingredientes.

Las fotos ilustrativas pertenecen a una serie de corners diseñados y construidos por nosotros en diferentes tiendas departamentales de México, bajo el título “Black & White”.


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