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Fuente: TotalRetail
A medida que las ventas minoristas vuelven de estar al borde del abismo, la narrativa pública ha pasado sutilmente del apocalipsis al renacimiento. Y si bien ha habido algunos avances impresionantes en el crecimiento general del comercio electrónico durante la pandemia, la gran mayoría de estas nuevas ventas minoristas provienen de tiendas físicas.
Entonces, si bien la conveniencia de la entrega a domicilio y la recogida en la acera son obvias para todos, los consumidores aún encuentran atractivo un viaje a la tienda local o al centro comercial.
Placewise realizó una encuesta de compradores en noviembre para ver cómo se sentían los consumidores acerca de las tiendas y los lugares que las albergan en un mundo con COVID endémico. No fue una sorpresa que la gran mayoría de los consumidores aún disfrutan de las compras en persona por todas las razones que muchos de nosotros ya conocemos: experiencia en la tienda, tocar y sentir, representantes de la tienda, hábito y conveniencia (sí, ¡las tiendas también pueden ser convenientes!) .
Pero no todo está del todo claro o ha vuelto a la “normalidad” para el comercio minorista, especialmente los centros comerciales. Solo el 15 por ciento de los encuestados sintió que la experiencia en su centro comercial local había mejorado en los últimos cinco años. Casi la mitad pensó que no había cambiado en absoluto y más de un tercio pensó que la experiencia había sido peor. Esa es una gran oportunidad tanto para los minoristas como para los operadores de centros comerciales.
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COVID trajo la idea de productos y servicios bajo demanda accesibles digitalmente al frente y en la mente de los últimos reticentes a la economía digital. Todo el mundo está en ello ahora. Impulsó las expectativas de todos los consumidores con respecto a cómo interactúan con las tiendas. Se puede suponer con seguridad que el nuevo orden mundial para el comercio minorista de todo tipo (tiendas, centros comerciales y realmente cualquier lugar de compras) necesitará incluir cosas como entrega el mismo día, recolección centralizada, transacciones digitales simplificadas e incluso recompensas y beneficios. .
La pandemia no convirtió al consumidor promedio en un antisocial que se oculta detrás de las paredes de su hogar y solicita entregas y recolecciones sin contacto. Todo lo contrario, de hecho. Todos nos dimos cuenta que somos criaturas sociales y ansiamos las experiencias que todos extrañamos en los primeros días de COVID. Las pandemias a lo largo de la historia nunca han podido alterar el principio fundamental central de que todos somos criaturas sociales. Incluso los más «antisociales» entre nosotros necesitan aventurarse en el mundo, ¡incluso si es solo para reunir más evidencia de que no les gustan otras personas!
Para los lugares de compras, como centros comerciales y tiendas, la oportunidad es sintonizar con las expectativas del consumidor que han evolucionado recientemente y brindar una experiencia superior que traiga herramientas digitales a la tienda física. Es una nueva era de la venta minorista en la que en línea, fuera de línea, en la tienda, el mismo día y en la acera, existen simultáneamente perfectamente sentados uno al lado del otro en la mente del consumidor, listos para implementarse según el capricho actual, las limitaciones de tiempo o el deseo de experiencia. Y es por eso que el 80 por ciento de los encuestados tenían interés en los lugares de compras con tecnología digital.